Uno de los usos habituales de la radiofrecuencia es la realización de tratamientos corporales.
La eficacia de la tecnología CEYA radica en las características de sus electrodos que provocan un efecto térmico directo sobre la zona a tratar, y gracias a la potencia de los equipos su frecuencia provoca un efecto de regeneración celular a trave de una oxigenación mayor de sangre y complementariamente una eliminación de toxinas.
La disolución de la grasa por el efecto térmico se evacua a través del propio organismo, y las pérdidas de peso apreciadas tras un tratamiento como mínimo son de 1 kg. por sesión.
Una sesión con los equipos de radiofrecuencia CEYA resulta completamente satisfactoria por sus resultados y por el efecto relajante provocado térmicamente
